Faltan plata e infraestructura - EL PAÍS Uruguay
Por um escritor misterioso
Descrição
Uruguay ya no es una potencia mundial en fútbol sala, sin embargo siempre es un rival a vencer. Competitivo. Esta es la palabra que define al futbolista uruguayo según el entrenador español Eduardo "Miki" García Belda, quien tiene en su curriculum haber dirigido a la Selección de Catar durante cinco años, al Barcelona, Valencia, Denia, El Pozo Murcia, entre otros cuadros españoles. "Cuando se ve a un futbolista uruguayo, ya sea de fútbol once o sala, es lo que destaca por encima de todo: esa sangre charrúa" dijo a Ovación. Sobre cómo ve actualmente al deporte del fútbol sala en Uruguay, analizó: "Hay muchas cosas para mejorar porque pasó de ser una de las cuatro mejores potencias a ser una selección normal. Tuvo un bajón deportivo y el problema principal es la plata. Es el reflejo de la sociedad. No se puede pagar la profesionalidad y no se le puede exigir a un amateur lo mismo que a un deportista que tiene una dedicación exclusiva". "Miki", como es conocido popularmente, se encuentra en el país por dos motivos: Peñarol y la Liga Maragata. Es que el fútbol sala de San José lo contrató para que entrene durante un mes a jugadores de la liga para formar una selección y brinde un curso técnico obligatorio a los entrenadores de la ciudad. Quienes no lo cursen, no van a poder dirigir el año que viene. "Desde hace dos meses veo doce videos semanales de la liga. Hicimos una preselección de 30 jugadores y vamos a terminar con 15 o 16 para que jueguen un cuadrangular con Peñarol, San Lorenzo y Argentinos Juniors". Pero lo que le atrajo principalmente para venir a Uruguay fue que lo invitara el club mirasol. "Es un cuadro muy importante en Europa, probablemente más que los equipos brasileños; por eso quise venir a trabajar aquí" explicó. Este tiempo viendo a los futbolistas uruguayos le permitió analizar cómo es la situación actual en Uruguay y compararla con España y Brasil, las dos grandes potencias mundiales del deporte. "Casi todos los jugadores uruguayos tiene la competitividad suficiente como para jugar en España, en ocasiones más que muchos españoles, incluso creo que al menos tres jugadores de Peñarol podrían jugar allá, y hay tres proyectos que si continúan así podrán. En cuanto a la técnica están al mismo nivel, aunque Brasil está muy por encima de los demás, por la forma en que se crían los futbolistas de allá. En vez de jugar lo que aquí se dice baby fútbol, todos los brasileños juegan al sala en espacios reducidos. Es por eso que tienen ese plus cultural. Creo que la principal carencia de los uruguayos es la táctica". Según "Miki", su país poseía problemas similares. Una de las soluciones que encontró para postular su liga por sobre las demás fue invertir en los entrenadores, hacerlos estudiar y profesionalizarlos. "Hace un par de años, de 16 equipos, 14 tenían técnicos extranjeros. Hoy en día la cifra se ha invertido. Además, si miras quienes dirigen a las selecciones, España es el país que exporta más directores técnicos", explicó a Ovación. Otro de los problemas que encontró en Uruguay fue la falta de infraestructura para que los clubes puedan jugar. "Allá cada equipo tiene su gimnasio y sino la alcaldía les presta. En mi época de jugador compartíamos el lugar con el equipo de básquetbol. Aquí son muy pocos los que hay y además, no tienen espacio para gradas". Este es un tercer problema que es no permitir popularizar aún más al deporte en Uruguay. Traer a expertos es el inicio de un nuevo proceso. "Con una semana de entrenamiento no puedes cambiar la forma de jugar. Si lo intentas hacer y te vas enseguida perjudicas más porque no hacen bien ni lo que les enseñás ni lo que hacían" dijo a Ovación el entrenador español Eduardo "Miki" García, quien manifestó que el hecho de que lo llamara Peñarol fue el motivo que lo convenció a venir a Uruguay. "Lo primero que hice al llegar fue ver un partido de ellos. Después intenté matizar determinadas situaciones de juego en que cometían errores puntuales para corregirlos. Hicimos material audiovisual de cómo sería lo correcto y cómo es. Luego ellos deben adaptar el material a la idiosincracia del fútbol sala uruguayo. La idea era abrir la mente y mostrar que hay algo más que Uruguay e intentar acercarse a ello". Con este objetivo en mente, Peñarol y "Miki" planean proyectos a futuro junto al fútbol once. Desde hace dos semanas Eduardo García se encuentra en el departamento de San José armando un seleccionado del departamento. Además, está brindando un curso técnico obligatorio teórico-práctico para los entrenadores. Allí verán cómo "Miki" realiza los ejercicios junto a los jugadores. Según comentó a Ovación, la principal diferencia con cómo se realizan en el Uruguay es la intensidad. "Debes encontrar la manera que realicen los ejercicios con un alto nivel de tensión y presión y no que sea un juego entre amigos. Es que los futbolistas juegan como entrenan. Esto sólo lo puede hacer el técnico o que haya público viendo a los entrenamientos". Luego participará de cursos similares en Perú, Colombia e Italia. "Para las fiestas debo estar en Madrid" bromeó. “Miki”. Se encuentra en Uruguay brindando cursos. Foto: Fernando Ponzetto FutsalELIANE BENGOECHEA
Uruguay ya no es una potencia mundial en fútbol sala, sin embargo siempre es un rival a vencer. Competitivo. Esta es la palabra que define al futbolista uruguayo según el entrenador español Eduardo Miki García Belda, quien tiene en su curriculum haber dirigido a la Selección de Catar durante cinco años, al Barcelona, Valencia, Denia, El Pozo Murcia, entre otros cuadros españoles. Cuando se ve a un futbolista uruguayo, ya sea de fútbol once o sala, es lo que destaca por encima de todo: esa sangre charrúa dijo a Ovación. Sobre cómo ve actualmente al deporte del fútbol sala en Uruguay, analizó: Hay muchas cosas para mejorar porque pasó de ser una de las cuatro mejores potencias a ser una selección normal. Tuvo un bajón deportivo y el problema principal es la plata. Es el reflejo de la sociedad. No se puede pagar la profesionalidad y no se le puede exigir a un amateur lo mismo que a un deportista que tiene una dedicación exclusiva. Miki, como es conocido popularmente, se encuentra en el país por dos motivos: Peñarol y la Liga Maragata. Es que el fútbol sala de San José lo contrató para que entrene durante un mes a jugadores de la liga para formar una selección y brinde un curso técnico obligatorio a los entrenadores de la ciudad. Quienes no lo cursen, no van a poder dirigir el año que viene. Desde hace dos meses veo doce videos semanales de la liga. Hicimos una preselección de 30 jugadores y vamos a terminar con 15 o 16 para que jueguen un cuadrangular con Peñarol, San Lorenzo y Argentinos Juniors. Pero lo que le atrajo principalmente para venir a Uruguay fue que lo invitara el club mirasol. Es un cuadro muy importante en Europa, probablemente más que los equipos brasileños; por eso quise venir a trabajar aquí explicó. Este tiempo viendo a los futbolistas uruguayos le permitió analizar cómo es la situación actual en Uruguay y compararla con España y Brasil, las dos grandes potencias mundiales del deporte. Casi todos los jugadores uruguayos tiene la competitividad suficiente como para jugar en España, en ocasiones más que muchos españoles, incluso creo que al menos tres jugadores de Peñarol podrían jugar allá, y hay tres proyectos que si continúan así podrán. En cuanto a la técnica están al mismo nivel, aunque Brasil está muy por encima de los demás, por la forma en que se crían los futbolistas de allá. En vez de jugar lo que aquí se dice baby fútbol, todos los brasileños juegan al sala en espacios reducidos. Es por eso que tienen ese plus cultural. Creo que la principal carencia de los uruguayos es la táctica. Según Miki, su país poseía problemas similares. Una de las soluciones que encontró para postular su liga por sobre las demás fue invertir en los entrenadores, hacerlos estudiar y profesionalizarlos. Hace un par de años, de 16 equipos, 14 tenían técnicos extranjeros. Hoy en día la cifra se ha invertido. Además, si miras quienes dirigen a las selecciones, España es el país que exporta más directores técnicos, explicó a Ovación. Otro de los problemas que encontró en Uruguay fue la falta de infraestructura para que los clubes puedan jugar. Allá cada equipo tiene su gimnasio y sino la alcaldía les presta. En mi época de jugador compartíamos el lugar con el equipo de básquetbol. Aquí son muy pocos los que hay y además, no tienen espacio para gradas. Este es un tercer problema que es no permitir popularizar aún más al deporte en Uruguay. Traer a expertos es el inicio de un nuevo proceso. Con una semana de entrenamiento no puedes cambiar la forma de jugar. Si lo intentas hacer y te vas enseguida perjudicas más porque no hacen bien ni lo que les enseñás ni lo que hacían dijo a Ovación el entrenador español Eduardo Miki García, quien manifestó que el hecho de que lo llamara Peñarol fue el motivo que lo convenció a venir a Uruguay. Lo primero que hice al llegar fue ver un partido de ellos. Después intenté matizar determinadas situaciones de juego en que cometían errores puntuales para corregirlos. Hicimos material audiovisual de cómo sería lo correcto y cómo es. Luego ellos deben adaptar el material a la idiosincracia del fútbol sala uruguayo. La idea era abrir la mente y mostrar que hay algo más que Uruguay e intentar acercarse a ello. Con este objetivo en mente, Peñarol y Miki planean proyectos a futuro junto al fútbol once. Desde hace dos semanas Eduardo García se encuentra en el departamento de San José armando un seleccionado del departamento. Además, está brindando un curso técnico obligatorio teórico-práctico para los entrenadores. Allí verán cómo Miki realiza los ejercicios junto a los jugadores. Según comentó a Ovación, la principal diferencia con cómo se realizan en el Uruguay es la intensidad. Debes encontrar la manera que realicen los ejercicios con un alto nivel de tensión y presión y no que sea un juego entre amigos. Es que los futbolistas juegan como entrenan. Esto sólo lo puede hacer el técnico o que haya público viendo a los entrenamientos. Luego participará de cursos similares en Perú, Colombia e Italia. Para las fiestas debo estar en Madrid bromeó. “Miki”. Se encuentra en Uruguay brindando cursos. Foto: Fernando Ponzetto FutsalELIANE BENGOECHEA
Uruguay ya no es una potencia mundial en fútbol sala, sin embargo siempre es un rival a vencer. Competitivo. Esta es la palabra que define al futbolista uruguayo según el entrenador español Eduardo Miki García Belda, quien tiene en su curriculum haber dirigido a la Selección de Catar durante cinco años, al Barcelona, Valencia, Denia, El Pozo Murcia, entre otros cuadros españoles. Cuando se ve a un futbolista uruguayo, ya sea de fútbol once o sala, es lo que destaca por encima de todo: esa sangre charrúa dijo a Ovación. Sobre cómo ve actualmente al deporte del fútbol sala en Uruguay, analizó: Hay muchas cosas para mejorar porque pasó de ser una de las cuatro mejores potencias a ser una selección normal. Tuvo un bajón deportivo y el problema principal es la plata. Es el reflejo de la sociedad. No se puede pagar la profesionalidad y no se le puede exigir a un amateur lo mismo que a un deportista que tiene una dedicación exclusiva. Miki, como es conocido popularmente, se encuentra en el país por dos motivos: Peñarol y la Liga Maragata. Es que el fútbol sala de San José lo contrató para que entrene durante un mes a jugadores de la liga para formar una selección y brinde un curso técnico obligatorio a los entrenadores de la ciudad. Quienes no lo cursen, no van a poder dirigir el año que viene. Desde hace dos meses veo doce videos semanales de la liga. Hicimos una preselección de 30 jugadores y vamos a terminar con 15 o 16 para que jueguen un cuadrangular con Peñarol, San Lorenzo y Argentinos Juniors. Pero lo que le atrajo principalmente para venir a Uruguay fue que lo invitara el club mirasol. Es un cuadro muy importante en Europa, probablemente más que los equipos brasileños; por eso quise venir a trabajar aquí explicó. Este tiempo viendo a los futbolistas uruguayos le permitió analizar cómo es la situación actual en Uruguay y compararla con España y Brasil, las dos grandes potencias mundiales del deporte. Casi todos los jugadores uruguayos tiene la competitividad suficiente como para jugar en España, en ocasiones más que muchos españoles, incluso creo que al menos tres jugadores de Peñarol podrían jugar allá, y hay tres proyectos que si continúan así podrán. En cuanto a la técnica están al mismo nivel, aunque Brasil está muy por encima de los demás, por la forma en que se crían los futbolistas de allá. En vez de jugar lo que aquí se dice baby fútbol, todos los brasileños juegan al sala en espacios reducidos. Es por eso que tienen ese plus cultural. Creo que la principal carencia de los uruguayos es la táctica. Según Miki, su país poseía problemas similares. Una de las soluciones que encontró para postular su liga por sobre las demás fue invertir en los entrenadores, hacerlos estudiar y profesionalizarlos. Hace un par de años, de 16 equipos, 14 tenían técnicos extranjeros. Hoy en día la cifra se ha invertido. Además, si miras quienes dirigen a las selecciones, España es el país que exporta más directores técnicos, explicó a Ovación. Otro de los problemas que encontró en Uruguay fue la falta de infraestructura para que los clubes puedan jugar. Allá cada equipo tiene su gimnasio y sino la alcaldía les presta. En mi época de jugador compartíamos el lugar con el equipo de básquetbol. Aquí son muy pocos los que hay y además, no tienen espacio para gradas. Este es un tercer problema que es no permitir popularizar aún más al deporte en Uruguay. Traer a expertos es el inicio de un nuevo proceso. Con una semana de entrenamiento no puedes cambiar la forma de jugar. Si lo intentas hacer y te vas enseguida perjudicas más porque no hacen bien ni lo que les enseñás ni lo que hacían dijo a Ovación el entrenador español Eduardo Miki García, quien manifestó que el hecho de que lo llamara Peñarol fue el motivo que lo convenció a venir a Uruguay. Lo primero que hice al llegar fue ver un partido de ellos. Después intenté matizar determinadas situaciones de juego en que cometían errores puntuales para corregirlos. Hicimos material audiovisual de cómo sería lo correcto y cómo es. Luego ellos deben adaptar el material a la idiosincracia del fútbol sala uruguayo. La idea era abrir la mente y mostrar que hay algo más que Uruguay e intentar acercarse a ello. Con este objetivo en mente, Peñarol y Miki planean proyectos a futuro junto al fútbol once. Desde hace dos semanas Eduardo García se encuentra en el departamento de San José armando un seleccionado del departamento. Además, está brindando un curso técnico obligatorio teórico-práctico para los entrenadores. Allí verán cómo Miki realiza los ejercicios junto a los jugadores. Según comentó a Ovación, la principal diferencia con cómo se realizan en el Uruguay es la intensidad. Debes encontrar la manera que realicen los ejercicios con un alto nivel de tensión y presión y no que sea un juego entre amigos. Es que los futbolistas juegan como entrenan. Esto sólo lo puede hacer el técnico o que haya público viendo a los entrenamientos. Luego participará de cursos similares en Perú, Colombia e Italia. Para las fiestas debo estar en Madrid bromeó. “Miki”. Se encuentra en Uruguay brindando cursos. Foto: Fernando Ponzetto FutsalELIANE BENGOECHEA
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